Dos de los festivales más destacados del verano mantienen la distancia con cortesía en el calendario estival
Vía: www.beckmesser.com
El jueves 25 comenzaban las representaciones de ‘Tannhäuser’ en Bayreuth; dos días más tarde, ‘Idomeneo’ inauguraba el Festival de Salzburgo. Ambos Festivales, citas imprescindibles del verano, mantienen en esos dos días una cortesía que se remonta a sus primeros años de convivencia.
“¿Por quéHerbert von Karajan dejó de dirigir en Bayreuthen la década de los 50?”, se preguntó el antiguo secretario general delFestival de Salzburgo, Franz Willnauer. A pesar del éxito cosechado porKarajancon su versión de ‘Los Maestros cantores’ y ‘Tristán e Isolda’ en elFestival de Bayreuth, el maestrodecidió ausentarse del foso de Bayreuth para siempre desde 1952.
Este gesto fue imperdonable para el entonces director delFestival de Bayreuth, Wieland Wagner, quien reprochó al director que sus ensayos estaban contaminados por el aburrimiento y el deterioro de su sonido. ¿AcasoKarajanera menos hábil para dirigir el repertorio wagneriano o simplemente quería causar esa impresión?
En 1967,Karajandirigió con un éxito abrumador unAnillo de los Nibelungosen elFestival de Pascua de Salzburgo, probando la equivocación de Wieland Wagner – o su provocación hacia él -. Así, con esta actuación,Karajanintroducía astutamente el repertorio deWagner en Salzburgoevitando las coincidencias con Bayreuth: dirigiríaWagner solo en Pascua, dando origen así alFestival de Pascua del Festival de Salzburgo.
A día de hoy, elFestival de Salzburgo y el de Bayreuth mantienen la distanciade la misma manera que en sus orígenes, aunque el calendario de los músicos, que terminan la temporada sinfónica en junio, ha solapado prácticamente el calendario de los festivales.